miércoles, 8 de enero de 2014

Vuelve a casa por Navidad ... si puedes ....


¡Qué tiempos aquellos en que lo importante era volver a casa por Navidad a los sones del anuncio del Almendro!



Ahora solo puedes volver a casa por Navidad si tienes un buen seguro de salud porque como vengas de países lejanos, esos a donde fuiste para ejercer la movilidad exterior y porque el gusanillo de la aventura que llevas dentro te estaba comiendo las entrañas (además del hambre), te vas a encontrar que como se te indigeste una almeja, te pille el virus cabrón de todas las navidades, te pegues un porrazo en el cotillón de turno o simplemente te duela el alma, que ya no eres de este mundo y en consecuencia, ni se te ocurra ir a la Seguridad Social que eso solo es para los que cotizan religiosamente. Al resto ni agua.

Por cierto, esta noche han acudido al Centro tres tipos que debían venir de un cotillón o de una fiesta de disfraces (menudas pintas) con lo típico de estas fiestas, agotados de tanta comida y con un poco de fiebre. Ellos alegaban exceso de trabajo acumulado y el virus de la gripe. Como eran extranjeros irregulares y sin contrato de trabajo les he mandado a tomar aire fresco y a volverse por Oriente de donde venían. Se han ido muy respetuosos y me han dejado carbón. Mira que son raros estos extranjeros

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